La insuficiencia tricúspide (IT) ha sido catalogada como la Cenicienta de las válvulas cardiacas, habiendo sido olvidada por muchos años por los cirujanos cardiovasculares.  Hace pocos años resurgió la importancia de tratar este tipo de problema, no sólo en los casos que sea secundaria a problemas valvulares mitrales o aórticos, sino a los problemas primarios de la válvula tricúspide.

Analizando el estudio presentado por el grupo de Corrigan Minehan Heart Center:  Surgery Does Not Improve Survival in Patients With Isolated Severe Tricuspid Regurgitation considero que es un estudio pionero en el manejo de la insuficiencia tricuspídea severa como causa exclusiva de cirugía. Analizaron retrospectivamente 3276 pacientes con IT aislada, y se analizó la sobrevida de aquellos intervenidos quirúrgicamente vs aquellos que no lo fueron. 171 pacientes (5%) fueron intervenidos quirúrgicamente, sin encontrar diferencias en términos de mortalidad entre ambos grupos.

Este estudio tiene limitaciones por tratarse de ser un estudio realizado de forma retrospectiva y en un solo centro.

Encuentro que hay un error en la Figura 3 donde el numero de pacientes de reparo es menor que el de los del reemplazo valvular. Reparó 28 y Reemplazó 144. Mientras que en el texto la cifra es completamente inversa. Pero analizando estas cifras es llamativo que la sobrevida a 5 y 10 años es del 52% y 22% para el reparo valvular, 53% y 21% para el reemplazo valvular respectivamente.

No se menciona la incidencia de Bloqueo AV. con necesidad de marcapaseo que debería alterar la sobrevida de los pacientes. Es importante conocer este dato para saber si los pacientes que fueron sometidos a reemplazo valvular tuvieron un riesgo mayor que los pacientes sometidos a plástica, y si la necesidad de marcapasos tubo relación con la morbi-mortalidad a mediano y largo plazo.

Debido a la morbi – mortalidad que puede generar la cirugía exclusiva de la válvula trircúspide de forma tardía, secundario al compromiso cardiaco, hepático y renal, se debe pensar en hacer intervenciones más tempranas para evitar el desarrollo de este tipo de complicaciones.

Por su puesto, en la era del manejo endovascular, creo que el tratamiento transcatéter de forma temprana puede ser la mejor forma de tratamiento, especialmente en casos tempranos de la insuficiencia donde puede ser más fácilmente corregido sin que se presente dilatación exagerada del anillo.

Este estudio promueve la realización de estudios multicéntricos, aleatorizados y randomizados que generen información y recomendaciones específicas de tratamiento en la enfermedad valvular tricuspídea para las próximas guías de enfermedad valvular.

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Referencia:

Isolated tricuspid regurgitation: outcomes and therapeutic interventions

Erin A Fender, Chad J Zack, Rick A Nishimura. Heart 2018;104:798–806. doi:10.1136/heartjnl-2017-311586