Revisión Sistemática - El síndrome de Brugada (BrS) es considerado responsable de más del 20% de las muertes súbitas (SCD) de pacientes con corazones estructuralmente normales.

Estudios previos, en pacientes portadores de marcapasos y desfibriladores, han demostrado que la fibrilación auricular subclínica es muy frecuente, y se asocia a un aumento en el riesgo de accidente cerebrovascular.

El síndrome de Brugada (SB) es un desorden raro que se asocia a muerte súbita secundaria a arritmias ventriculares malignas.

Estudio de una población rural Costera de Ecuador consumidores frecuentes de pescado- PROYECTO ATAHUALPA

En el siglo pasado, la digitalización de las señales analógicas representó un avance enorme en el procesamiento de hechos o datos físicos (por ejemplo, acústicos o eléctricos), químicos (por ejemplo, el pH) y por tanto, biológicos.

La capacidad que tienen los marcapasos y/o desfibriladores cardíacos (MP-CDI) modernos de funcionar como un monitor continuo ha llevado a la observación que episodios transitorios y cortos (minutos, horas) de fibrilación auricular (FA) son frecuentes en pacientes portadores de MP-CDI.

El documento “Evaluación cardiovascular pre-participación para la prevención de muerte súbita en atletas” es un consenso de expertos de la Asociación Europea de Trastornos del Ritmo (European Heart Rhythm Association) cuyos coordinadores fueron los doctores Lluís Mont de España y Antonio Pelliccia de Italia.

La Fibrilación auricular (FA) es la arritmia más común de la práctica clínica, con una prevalencia del 5% en pacientes >65 años, y una incidencia que aumenta con la edad en forma progresiva.

Basados en la presunción de que aproximadamente el 90% de los trombos en la FA de origen no valvular se originan en la orejuela izquierda, diferentes alternativas que persiguen “excluir” la OI de la circulación sistémica se fueron desarrollando.