Diferencias de género en Cardiopatía Isquémica Avances, obstáculos y nuevos pasos

Diferencias de género en Cardiopatía Isquémica  Avances, obstáculos y nuevos pasos

El presente artículo resume las tendencias actuales, caracteriza las disparidades en la evolución según sexo, presenta desafíos para el logro de una atención médica equitativa y propone soluciones que contribuyan a mejorar la situación de la enfermedad cardíaca isquémica en la mujer. INTRODUCCIÓN La enfermedad cardíaca isquémica (ECI) constituye la primera causa de muerte en

El presente artículo resume las tendencias actuales, caracteriza las disparidades en la evolución según sexo, presenta desafíos para el logro de una atención médica equitativa y propone soluciones que contribuyan a mejorar la situación de la enfermedad cardíaca isquémica en la mujer.

INTRODUCCIÓN

La enfermedad cardíaca isquémica (ECI) constituye la primera causa de muerte en la mujer en los países de altos ingresos y en buena parte de aquellos con medianos ingresos. Pero persisten importantes disparidades entre diferentes subgrupos de mujeres, particularmente aquellas que se encuentran socialmente en desventaja por motivos de raza, etnicidad, niveles de ingreso y nivel educacional alcanzado, además de que las mujeres no están adecuadamente representadas en las investigaciones realizadas, todo lo que ocasiona un impacto desfavorable en el diagnóstico, la prevención y las estrategias de tratamiento en mujeres en riesgo para desarrollar enfermedad cardiovascular. El presente artículo resume las tendencias actuales, caracteriza las disparidades en la evolución según sexo, presenta desafíos para el logro de una atención médica equitativa y propone soluciones que contribuyan a mejorar la situación de la ECI en la mujer 1.

 

COMENTARIOS 

La ECI es la principal causa de mortalidad en mujeres, responsable de la tercera parte de las muertes en mujeres a nivel mundial 2. Es importante considerar que los problemas de salud en la mujer deben abordarse desde dos ángulos: las diferencias de sexo (aspectos biológicos que influyen en el espectro de la ECI que va desde la enfermedad coronaria epicárdica obstructiva hasta la disfunción microvascular y el papel del endotelio vascular), y las diferencias de género (aquellas afectadas por factores sociales, ambientales y comunitarios) 3.

La hipertensión arterial, la diabetes mellitus (DM) y el hábito de fumar son factores de riesgo tradicionales para el desarrollo de un infarto del miocardio (IM) más potentes en mujeres que en hombres. Se consideran factores de riesgo no tradicionales específicos de la mujer: menopausia o menarquia tempranas, DM gestacional, hipertensión, preeclampsia y eclampsia durante el embarazo, y enfermedades inflamatorias sistémicas como el lupus eritematoso y la artritis reumatoide.

El cuadro clínico también puede mostrar diferencias según sexo: las mujeres refieren disnea, debilidad, dolor en el brazo, mandíbula o espalda, palpitaciones, náuseas y presentan menos frecuentemente angina típica. El 60% de las mujeres sintomáticas no tienen estenosis coronarias que limiten flujo, la enfermedad microvascular y la disfunción endotelial son más frecuentes y muestran más erosión de la placa coronaria en contraste con más ruptura de la placa en hombres  4.

Es importante recordar también que la disfunción microvascular en ausencia de enfermedad epicárdica obstructiva no representa un pronóstico benigno. Además puede ser la causa de una menor sensibilidad de la prueba de esfuerzo, por lo que deben considerarse el riesgo pre-test de ECI y la posibilidad o no de realizar ejercicio físico antes de indicar la prueba diagnóstica y de decidir si el estudio será anatómico o funcional y en este último, el tipo de estrés a aplicar (físico o farmacológico) 5.

Las técnicas de imagen cardíaca actuales se enfocan a la detección de la extensión y severidad de la isquemia resultante de la enfermedad coronaria obstructiva, visualización de la carga de placa no obstructiva mediante la tomografía axial computarizada y la valoración de la enfermedad de pequeños vasos mediante la evaluación de la reserva de flujo coronario (utilizando la tomografía de emisión de positrones o la resonancia magnética cardíaca de estrés) 6.

Aunque la mortalidad por ECI ha disminuido en las últimas 4 décadas en países con altos ingresos, persisten las diferencias según sexo en la evolución y la conducta seguida con el paciente:

– Mayor mortalidad intrahospitalaria y al primer año luego de un síndrome coronario agudo, así como mayor incidencia de shock cardiogénico e insuficiencia cardíaca en mujeres 7-9.

– Mayores tiempos entre la llegada al hospital y el proceder intervencionista, principalmente en mujeres más jóvenes 7.

– Menos revascularizaciones (mayor complejidad técnica por arterias coronarias más pequeñas, menos enfermedad obstructiva y mayor percepción de complicaciones postproceder).

– Menos rehabilitación cardíaca (influenciado por menor indicación del médico de asistencia, problemas económicos, mayores responsabilidades familiares, inadecuada comprensión de la necesidad de hacerlo, sistema de apoyo social subóptimo, mayores comorbilidades).

– Menos tratamiento médico óptimo, incluyendo menos prevención secundaria.

 

Desafíos actuales y soluciones para una atención médica equitativa en mujeres

Los autores señalan que debe hacerse énfasis en los aspectos siguientes 1:

Conciencia pública. Es necesario aumentar la conciencia del riesgo de ECI entre las mujeres mediante campañas de educación y mensajes a través de los medios sociales, que incluyan también a las jóvenes y a las minorías. Favorecer la participación de la comunidad, la escuela, las organizaciones sociales, las organizaciones de pacientes y los líderes comunitarios.

Utilización de guías específicas según sexo y género, integrando un curriculum cardiovascular con enfoque de sexo en las escuelas de medicina y enfermería, un trabajo conjunto con equipos de salud que están más en contacto con las pacientes femeninas, como la atención primaria, obstetricia y ginecología, emergencias, así como la promoción de módulos con enfoque de sexo y de género en eventos científicos.

Inclusión de pacientes femeninas en las investigaciones. Esto reviste una importancia crucial, pues la poca representación femenina en la investigación hace que los resultados de los hombres se extrapolen a las mujeres sin tener en cuenta las diferencias de sexo y género.

Reconocer otros importantes determinantes de salud. Las variables psicosociales, incluyendo el apoyo social percibido, la depresión y la ansiedad luego de un evento cardíaco, las responsabilidades familiares, el estrés, se asocian con estilos de vida no saludables y pobre adherencia al tratamiento y a la modificación de los factores de riesgo. Por tanto son necesarias intervenciones que proporcionen un apoyo social y emocional, así como un mayor acceso a la educación y mejores oportunidades económicas.

Centros de Salud Cardiovascular para la Mujer. Comprenden un grupo multidisciplinario de especialistas que enfrentan los problemas de salud en la mujer. Contribuyen a mejorar la salud cardiovascular en la mujer mediante investigación avanzada y la implementación de estrategias de prevención, diagnóstico y tratamiento con enfoque específico de sexo y género que pueden conducir a la eliminación de las disparidades.

Medidas legislativas y políticas sociales que contribuyan a lograr una atención equitativa para las mujeres.

 

 

REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS

  1. Aggarwal NR, Patel HN, Mehta LS, Sanghani RM, Lundberg GP, Lewis SJ, et al. Sex differences in ischemic heart disease. Advances, obstacles, and next steps. Circ Cardiovasc Qual Outcomes. 2018;11:e004437. DOI:10.1161/CIRCOUTCOMES.117.004437
  2. Bots SH, Peters SAE, Woodward M. Sex differences in coronary heart disease and stroke mortality: a global assessment of the effect of ageing between 1980 and 2010. BMJ Glob Health. 2017;2:e000298. doi: 10.1136/bmjgh-2017-000298.
  3. Institute of Medicine (US) Committee on Women’s Health Research. Women’s Health Research: Progress, Pitfalls, and Promise. Washington, DC: National Academies Press; 2010.
  4. Bairey Merz CN, Shaw LJ, Reis SE, Bittner V, Kelsey SF, Olson M, et al; WISE Investigators. Insights from the NHLBI Sponsored Women’s Ischemia Syndrome Evaluation (WISE) Study: part II: gender differences in presentation, diagnosis, and outcome with regard to gender-based pathophysiology of atherosclerosis and macrovascular and microvascular coronary disease. J Am Coll Cardiol. 2006;47(suppl 3):S21–S29.
  5. Mieres JH, Gulati M, Bairey Merz N, Berman DS, Gerber TC, Hayes SN, et al; American Heart Association Cardiac Imaging Committee of the Council on Clinical Cardiology; Cardiovascular Imaging and Intervention Committee of the Council on Cardiovascular Radiology and Intervention. Role of noninvasive testing in the clinical evaluation of women with suspected ischemic heart disease: a consensus statement from the American Heart Association. Circulation. 2014;130:350–379.
  6. Taqueti VR, Dorbala S, Wolinsky D, Abbott B, Heller GV, Bateman TM, et al. Myocardial perfusion imaging in women for the evaluation of stable ischemic heart disease state-of-the-evidence and clinical recommendations. J Nucl Cardiol. 2017;24:1402–1426.
  7. Roswell RO, Kunkes J, Chen AY, Chiswell K, Iqbal S, Roe MT, et al. Impact of sex and contact-to-device time on clinical outcomes in acute ST-segment elevation myocardial infarction-findings from the National Cardiovascular Data Registry. J Am Heart Assoc. 2017;6:e004521. doi:10.1161/JAHA.116.004521.
  8. Shaw LJ, Shaw RE, Merz CN, Brindis RG, Klein LW, Nallamothu B, et al. Impact of ethnicity and gender differences on angiographic coronary artery disease prevalence and in-hospital mortality in the American College of Cardiology-National Cardiovascular Data Registry. Circulation. 2008;117:1787–1801.
  9. Kunadian V, Qiu W, Lagerqvist B, Johnston N, Sinclair H, Tan Y, et al; National Institute for Cardiovascular Outcomes Research and Swedish Coronary Angiography and Angioplasty Registries. Gender differences in outcomes and predictors of all-cause mortality after percutaneous coronary intervention (Data from United Kingdom and Sweden). Am J Cardiol. 2017;119:210–216.

Posts Carousel

Deje un comentario

Registrese para comentar. Sus e-mail no será publicados

Cancel reply